EL DERECHO AL CAMPO: Un proyecto de ley que acoge la lucha y apuestas del mundo rural
Colombia históricamente, desde su origen como República, ha basado su economía fundamentalmente en la producción de materias primas, dirigidas en su mayoría a la exportación de acuerdo a las demandas de los países desarrollados.
Sumado a lo anterior, el bajo nivel de industrialización por no decir nulo- y su rápido endeudamiento externo, lo fue convirtiendo en un país dependiente del gran capital y del imperialismo, principalmente del norteamericano. Subordinado entonces a las políticas de los países del Norte y de los organismos multilaterales, que aquellos manipulan, como elFondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Mundial (BM), el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), y la agonizante Organización Mundial del Comercio (OMC), entre otras, se fue moldeando la nueva institucionalidad acorde a las necesidades del momento, caracterizadas y fundamentadas en las políticas neoliberales, convirtiéndose el Estado en un peón más al servicio del libre mercado.
La constitución de 1991 que no dio reconocimiento al campesinado, negando su papel esencial en la vida nacional, a través de lo que significa y representa la existencia de la economía campesina para la gran mayoría de las colombianas y colombianos, que no obstante de la apertura económica, culpable de la destrucción de gran parte de la producción agropecuaria y la institucionalidad al servicio del campo colombiano, la economía campesina continúa produciendo cerca del 50% de los alimentos que consumimos los colombianos y colombianas.
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